Técnica de carrera en el corredor de fondo

Todos sabemos que para el corredor de fondo la técnica es un contenido muy importante a trabajar. Una buena técnica de carrera nos ayudará a reducir el riesgo de lesionarnos y a correr de una manera más económica y eficiente (gastar menos independientemente del ritmo al que vayamos). A grosso modo, la técnica la podemos mejorar de manera consciente a través del conocimiento y análisis de nuestra manera de correr; y sobre todo de una manera inconsciente, por la que con ejercicios coordinativos las mejoras fundamentalmente en el sistema nervioso nos hacen más eficientes (el movimiento repetitivo así lo hace y además, movemos los músculos implicados en la carrera).  Aunque hay algunos matices.

Por otro lado, lo que está claro es que en las Ciencias de la Actividad Física y el Deporte puede haber cambios que planteen la evolución de dogmas ciertamente consolidados. Toda ciencia evoluciona, y en este aspecto, la biomecánica es una de ellas. Digamos que, centrándonos en la técnica del corredor de fondo, ha habido algunos ligeros cambios, sobretodo respecto al apoyo del pie en la línea vertical y la superficie de contacto del pie en el suelo. Todo ello está condicionado por la actualización de las marcas deportivas quitando amortiguación a las zapatillas (sobretodo en el talón) y por la corriente minimalista (tema tremendamente de moda aunque no vamos a profundizar). Aquí presentamos una serie de pautas que nos pueden ayudar a correr de una manera más eficiente y más lejos de las lesiones.

DIETA/S A SEGUIR LA SEMANA ANTES DEL MARATÓN

La siguiente dieta que presentamos (aprovechando que tenemos a la vuelta de la esquina el maratón de Valencia), es generalmente utilizada para carreras de mayor duración a una hora y media. El maratón es una de ellas, por lo que la ingesta de carbohidratos debe ser una estrategia primordial, ya que el glucógeno va a ser fundamentalmente la fuente de energía que predomine (aunque cuanto más baja es la intensidad de carrera del maratón más se tiende a igualar la proveniencia de energía con los lípidos), y sobre todo va a ser la de mayor calidad.

VARIABLES MODIFICABLES EN LOS MÉTODOS PARA DEPORTES DE RESISTENCIA

Existen varias clasificaciones de métodos de la resistencia, coincidiendo generalmente en la diferenciación entre los métodos continuos (uniforme o variable) y fraccionados (interválicos o por repeticiones –añadiéndose actualmente los métodos intermitentes-). Todos ellos varían en función de la intensidad, densidad y duración, y con ello la adaptación fisiológica que se les atribuye. Además, podríamos añadir dos métodos más, según autores, como los métodos mixtos (uniendo método fraccionado y continuo variable, por ejemplo) y métodos de competición, que estarían dentro de los fraccionados y que intenta reproducir las demandas de la competición fraccionándola en distancia o tiempo.

En cualquier caso, en esta entrada vamos a definir y ejemplificar las variables que pueden condicionar los objetivos de un método u otro para cumplir, sobretodo, los principios de progresión y de periodización (sin nombrar algunos más como la individualización, ya que en función del nivel del deportista varían los métodos más eficaces y las intensidades recomendadas). Es decir, vamos a intentar dilucidar de manera breve, a grandes rasgos y de manera sencilla (ya que esto tiene mucha más complejidad y requiere mayor extensión), la manera de emplear unos métodos detrás de otros para maximizar su efecto. Así, estas variables modificables serían: la modalidad del estímulo, la duración del estímulo, la intensidad del estímulo, duración de la pausa, tipo de pausa, actividad en la pausa, número de repeticiones, duración de las repeticiones, número de series, pausa entre las series y duración del programa.

Así, teniendo en cuenta estas variables, vamos a ir manipulando un ejemplo para aumentar la carga de un método o reducirla a través de dichas variables. Tenemos el siguiente método para mejorar el umbral anaeróbico: 6 x 6’ al 85%VAM o FCumbral/1’ (*VAM=velocidad aeróbica máxima). Es decir, seis series de 6 minutos al 85% de la VAM o la frecuencia cardíaca umbral con pausa pasiva de 1 minuto. Así que este va a ser el ejemplo que vamos a seguir. 

ZONAS DE ENTRENAMIENTO DE LA RESISTENCIA

Como sabemos, todos los deportistas no tienen la suerte de contar regularmente con pruebas de esfuerzo que nos ayuden a delimitar las zonas de entrenamiento y a realizar un seguimiento constante. Aún así, según Mujika (2006), una única evaluación a principio de temporada podría ser suficiente para determinar índices de entrenamiento adecuados que serían estables en el tiempo en cuanto a relación lactato-frecuencia cardíaca se refiere. No obstante, los ritmos o la potencia son mucho más variables, por lo que se deben ir modificando a lo largo de la temporada. Así, lo más recomendable sería, en su caso, seguir la FC como parámetro a principio de la temporada, para ir cediendo protagonismo a los ritmos a medida que se acerque el período competitivo. A pesar de ello, como hemos comentado, a veces no se puede acceder a estos recursos ni única vez cada temporada, y por ello, debemos ver qué hacemos para trabajar de una manera óptima y congruente de acuerdo con las ciencias del deporte y del ejercicio físico.

Facebook

Newsletter